Paula con 4 años quería ser una princesa pero ahora con 9 quiere ser una monstruosa Monster High. Ella ha crecido y aunque a mi me da un poco de pena que se haga mayor, tengo que aceptar que dentro de poco me diga que las cosas que hago son tonterías. Pero por ahora disfruto con que quiera ponerse a mi lado para ver lo que hago e intente ella hacer cosas parecidas. Así que cuando se acercaba su cumple y me dijo que quería una Fiesta de Pijamas, mi fábrica de ideas se puso a rodar. Hacer que 9 niñas estén entretenidas varias horas y parte de la noche en un piso de 70 m2, parecía un reto difícil de conseguir. Pero la cara de felicidad de mi hija mientras veía como salían nuevas cosas de mi pequeño puesto de trabajo me dió las fuerzas suficientes.
Mi primer proyecto fueron las tarjetas de invitación, la calavera de las Monster High fueron una bonita forma para invitar a sus amigas y empezar a realizar todos los demás proyectos de temática Monster.
Si ya había empezado porque iba a dejarme en el tintero todas las ideas que se me ocurrían, una guirnalda, calaveras para las pajitas, vasos con pegatinas, un mantel que la propia Paula pintó, tarjetas VIP para las invitadas. No faltó de nada. Y para que las niñas se entretuvieran en esa noche terrorífica, a su disposición una manicura y un tatuador (mi marido). Y capítulos y película de Monster High con unas buenas palomitas. Nos divertimos mucho y creo que las niñas también, quedaron agotadas y con ganas de más.
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| Calaveras para las pajitas |
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| Tarjetas VIP |
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| Guirnalda |
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| Vasos, platos, servilletas y mantel con temática Monster High |
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| Mesa de aperitivos. |
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| Pintura de uñas y tatuador de figuras Monster High. Bolsas personalizadas con chuches para el final de fiesta. |
Y para terminar me atreví con algo que me hacía mucha ilusión: Una tarta de fondant.
Quedé agotada, pero valió la pena.
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